RED territorial de investigación educativa: tecnología, territorio y desigualdades
Autor/es: Roberto Canales Reyes (Universidad de Los Lagos), Cristina Andrea Alarcón Salvo (Universidad de Los Lagos)
Eje: Educación y tecnologías digitales
Palabras clave: Investigación educativa | Tecnología y Comunidad de aprendizaje | Desigualdades territoriales
Mesa: Educación y tecnologías digitales IV: experiencias y nuevas fronteras
Día y hora: Miércoles 11, 16:30-18:30
Lugar: Aula 10
Resumen:
La RED territorial de investigación educativa: tecnología, territorio y desigualdades, tiene como propósito generar investigación educativa a través de una RED territorial co-construida con docentes de establecimientos educacionales públicos de las provincias de Osorno, en articulación con la Universidad y la institucionalidad de la nueva educación pública, que permita producir conocimiento, colaborar y sustentar innovaciones educativas de aula. Un componente central de la innovación educativa es actualmente el mejoramiento de las competencias digitales docentes (CDD) y su evaluación de desempeño. En esta propuesta, las redes de colaboración educativas, son consideraras como comunidades de aprendizaje, proyectos de transformación social y cultural, que se fundamentan en el diálogo, participación y colaboración entre iguales. El abordaje teórico se puede realizar desde una perspectiva psicológica socio constructivista (Vigostky, 1979), potenciando el aprender haciendo de forma colectiva. Se complementan con la perspectiva educativa de carácter dialógica de Paulo Freire (1979), lo cual involucra, no solo la interacción entre los agentes de la comunidad, sino que además, enfatiza en el compromiso, reflexión crítica y el fortalecimiento de la identidad de las personas para el desarrollo profesional del colectivo, apoyándose en mediadores para el aprendizaje (docentes, procesos de formación, recursos bibliográficos, recursos digitales de aprendizaje, materiales educativos, protocolos de acción, etc.) como instrumentos de cambio psicológico, articuladores de los procesos inter e intrapsicológicos generado por los entornos semióticos. Flores-Fahara (2021), plantea que la comunidad de aprendizaje, es un espacio y oportunidad de interacción y comunicación para el trabajo colaborativo, para aprender y compartir, sobre todo a nivel de las buenas prácticas tanto a nivel pedagógico como de gestión, toda vez que los docentes no comparten regularmente sus prácticas, no tienen los tiempos ni espacios para el aprendizaje socialmente compartido. Por ello, los dispositivos que faciliten dichos intercambios revisten una oportunidad y una esperanza para la mejora de prácticas educativas y sus resultados.
